El Cazador 4/4 es el segundo single de presentación del próximo extended play del dúo ovetense Virginia & the Wolf, tras la publicación de su EP debut ‘‘Ultramar’’ en 2019. Se trata de una revisión de la canción El Cazador, ya presente en “Ultramar”, con un cambio en el tempo y en la producción, que como en el resto de este trabajo corre a cargo de la formación asturiana Desobediencia Tecnológica.

Esta composición de Paula Argüeso, con voces de Argüeso y de Antonio Irún, narra a través de metáforas poéticas la relación personal que la autora, pero también el ser humano en general, tiene con el miedo. La figura del cazador es una personificación del miedo como una fuerza paralizante que nos acecha y se interpone en nuestro camino hacia el bienestar, representado en la letra por “el sol que irradia incandescente”.

Todo el campo semántico del miedo que está presente en la letra está expresado a través de símbolos inquietantes como los sueños que tu sangre agitan, las sombras lúgubres, el falso abrigo, las cárceles de cristal o las hormigas que trepan por nuestro cuerpo inmóvil. Estos motivos siniestros tienen como objetivo transmitir las sensaciones que la autora experimentó meses antes de escribir la canción, durante una crisis de ansiedad. Sin embargo, en un afán terapéutico por avanzar, la historia de El Cazador no se queda ahí. Si los estribillos y el puente son crudos, el mensaje principal, condensado en el estribillo, es un canto de esperanza hacia la posibilidad de liberarnos del miedo o, al menos, a la idea de poder vivir tranquilos, sin que esta emoción se apodere de nosotros. El Cazador mira hacia un futuro ideal en el que efectivamente el miedo se ha ido. Y es que: “Cuando llegues a la meta el cazador se irá”.



Debido a la imagen del cazador, en un primer momento Argüeso e Irún situaron esta canción en un bosque, un bosque oscuro que los protagonistas, los autores, pero también los oyentes, transitan en su lucha contra el miedo, encontrando la reconciliación y la calma al final de este bosque,. En esta nueva versión, el género musical de la canción cambia y pasa de ser un tema pop folk, con un tempo de 6 por 8, que nos recuerda a alguien huyendo del cazador dentro de ese bosque, a tener un estilo de pop electrónico que recuerda a grupos como The XX o a solistas como Billie Eilish. El cambio de tempo a un 4 por 4 (como el propio título indica) y el estilo vocal más monótono y entrecortado consigue que la canción sea más fría, aproximándose más al miedo que la letra describe. Para complementar esta frialdad, la producción de Desobediencia Tecnológica juega con los sintetizadores intercalando frescas líneas melódicas que le dan color y ritmo a esta nueva versión. Gracias a este contraste El Cazador 4/4 se resitúa, con nuevos ropajes electrónicos, en un mood muy contemporáneo de felicidad y tristeza simultáneas que se siente como bailar en casa mientras recuerdas, con inevitable nostalgia, cómo era bailar en una discoteca.